Para un occidental, Japón es la mayor experiencia posible del “otro” dentro de una cultura que un europeo o un estadounidense consideraría a la par en cuanto a naciones avanzadas y sociedades modernas en el mundo. Japón es, entre todos los países tecnológicamente ultra desarrollados, como un extraterrestre para alguien como yo. Su cultura nos fascina, y, a pesar de tener sistemas políticos, industriales, económicos, urbanos y sociales muy parecidos, y de rodearse de objetos muy similares a los que usamos en Occidente, puede que sea su su propia capacidad de japonizarlo todo la que más nos llama la atención.
He tardado mucho en escribir el título de este capítulo, porque es difícil hablar de un país tan fascinante como Japón sin recurrir a la fascinación, precisamente, a los estereotipos, a los mitos, a la imagen de cultura milenaria exótica que tenemos en Occidente de Japón y a las contradicciones que una occidental puede observar en cada aspecto de la cultura nipona… mi intención a la hora de elegir este tema era analizar mi propia fascinación con este país, que comparto con tanta gente. También, el poder estudiar las múltiples facetas positivas y negativas de las culturas que más interés y pasión despiertan en el mundo y el por qué de esta fascinación. Por supuesto, en mi faceta Wanderlust, quería descubrir qué parte de esa tan conocida relación de los japoneses (no los urbanitas) con la Naturaleza y la espiritualidad podía servirnos de ejemplo a los que muchas veces vivimos de espaldas a nuestra parte más natural y espiritual. A la vez, quería hablar de la parte oscura de un país que muchas veces parece ser la avanzadilla del mundo moderno, también en cuestiones sociales.
Y de esta manera, intentar entender este fenómeno de fascinación por lo japonés que nos embarga a los europeos desde que el país salió de su aislamiento en el siglo XIX después de 200 años de corte total de relaciones exteriores, y los europeos pudieron contemplar con fascinación un país tan lejano, exquisito y exótico como les contaban los viajeros y comerciantes. De esta manera comenzó una tendencia en arte y decoración inspirada en las ilustraciones traídas de Japón como por ejemplo los grabados de Hokusai(ya sabéis, la famosa ola de Hokusai) llamada japonismo, y es que este arte enamoró a artistas como Van Gogh o Degas. Todo esto, añadido a la lejanía del país y los relatos fabulosos llenos de exotismo que traían los viajeros y comerciantes, fue configurando un estereotipo muy seductor, lleno de misterio y exotismo, que dura hasta hoy. De hecho, Japón ha sido muy hábil a la hora de alimentar ese mito de «cultura milenaria» y de ejercer ese poder blando a través de la fascinación por su cultura, con la gastronomía, el cine, anime y manga, arte… Lo que, unido a la innovación en tecnología, configura ese ‘cool Japan’ que tan bien se vende de cara al exterior.
Japón, el país del sol naciente, es en el imaginario occidental la quintaesencia de lo Oriental, un país enigmático de exquisito arte, gastronomía, literatura y modales, lleno de misteriosos rituales y mitos, y la meca de los apasionados de las nuevas tecnologías, con permiso del Silicon Valley americano. Un país que ha exportado cultura pero también un estilo de vida en armonía con la naturaleza, con los ritmos más propiamente humanos y con filosofías que enseñan el respeto por la vida de todo ser vivo, toda persona, proceso, ritual y trabajo como una manera de dar sentido a nuestra existencia y vivirla plenamente. Japón da cabida asimismo a muchas contradicciones, sobre todo en materia social, que resultan muy chocantes con esta imagen brillante y delicada que tenemos de este país, y si bien todos los países tienen sus luces y sus sombras, creo que ninguno despierta tantas pasiones como Japón de forma que sus oscuridades nos intrigan aún más.
Sé que me he flipado, claramente, y que mi propósito es demasiado ambicioso y ni de coña lo conseguiré en un episodio, pero vamos a intentar descubrir un poco más sobre las luces y sombras de Japón, de la mano de Japonismo.
Hola, soy Paula Martín, periodista especializada en podcasting y en antropología sociocultural, y esto es “¿Cómo hemos llegado hasta aquí?”, el podcast en el que le buscamos explicación a la fascinación de Occidente con ciertos países como Japón, como la exótica joya de Asia que es, e intentamos descubrir sus luces y sombras y qué nos enseñan estos matices sobre las sociedades humanas modernas en las que vivimos.
Al otro extremo del micro doy la bienvenida a Luis Rodríguez y Laura Tomás, de Japonismo, el mayor portal web en español sobre Japón, activo desde hace casi 20 años. Luis es ingeniero de telecomunicaciones y tiene un máster en China y Japón contemporáneos y Laura es traductora e intérprete de japonés y tiene un máster en estudios de Asia Oriental, y junto a su hijo Eric, viajan cada año 3 o 4 veces a Japón para investigar para sus lectores sobre este fascinante país, y también nos lo cuentan en su podcast que ya lleva unas cuantas temporadas y al que estoy totalmente enganchada.
Es increíble la cantidad de podcast, libros, documentales, películas que hay sobre Japón… Por qué creéis que nos fascina tanto a los occidentales y en especial a los españoles?
- El gaijin: la imposibilidad de integrarse totalmente en Japón porque siempre se es percibido como extranjero
- Esto nos lleva al primer gran enigma con los que nos hemos ido encontrando en Japón…
- Sakoku, o aislamiento: en 1633 se impuso un aislamiento del exterior durante 200 años prohibiendo las relaciones comerciales, que se explica como forma de protegerse frente a amenazas externas como la propagación del cristianismo, o los piratas, o para que los reinos alejados del actual Tokio no pudieran enriquecerse gracias al comercio exterior, pero este aislamiento lo impregna todo en la sociedad japonesa. Prefieren vivir hacia adentro, japonizarlo todo, y mantener a raya lo extranjero, incluso no exportar los productos que perciben como “demasiado japoneses” o no internacionalizar las empresas, como una forma de protección de su cultura y su economía.
– y esto de qué manera se traslada a la sociedad? - las catástrofes naturales: Japón está situada justo encima de Cinturón de Fuego del Pacífico, lo que provoca frecuentes movimientos sísmicos, erupciones volcánicas y tsunamis. Además, continuamente se producen inundaciones y tifones.
– catástrofe de Fukushima, recordemos que todo comenzó con un terremoto de escala 9 en Tōhoku el 11 de marzo de 2011, que se transformó en un tsunami de 14 metros de altura que impactó contra las costas japonesas y la central nuclear de Fukushima, que en una serie de fallos en cadena liberó al océano grandes cantidades de agua radiactiva y contaminó el aire con radiación en un radio de 20 kilómetros. Realmente, Godzilla y todos los monstruos que vemos en los anime japoneses están bien justificados por todas las catástrofes naturales a las que están expuestos en Japón.
– esto les hace ser ultra cautos y no actuar hasta estar completamente seguros de lo que van a hacer, y de haber planificado hasta los posibles imprevistos. Piensan siempre a largo plazo, analizan todos los riesgos habidos y por haber, y piensan en que lo que haga perdure en el tiempo, con vistas a dejárselo a las siguientes generaciones. Qué diferente esto frente al cortoplacismo imperante ahora mismo en nuestras sociedades occidentales, a nivel político, empresarial, en la planificación de la vida de la gente…
– esto también les hace desear siempre mejorar, para no bajar la guardia no? En lo que conocemos como kaizen, la mejora continua pero poco a poco.
– precisamente a nivel empresarial, aunque tarden eones en decidirse y considerar y planificar absolutamente todos los riesgos y pormenores, a la hora de decidirse y ejecutar un plan, serán como un tanque, no? Van sobre súper seguro.
– y por qué parece entonces un país puntero en tecnología e innovaciones que ésta introduce a nivel social, como el tema de los cyborg y el yo digital?
– al mismo tiempo, viven más el presente, porque quizá 5 minutos después podría desatarse un tsunami… es contradictorio con la extrema cautela y conservadurismo, pero tiene sentido.
– por esta razón cada persona tiene su mochila de 72h, para poder sobrevivir a una catástrofe natural por sus propios medios.
– cómo les hace pensar en su relación con la naturaleza estas catástrofes naturales?
– además Japón es uno de los países más expuestos al cambio climático… Qué medidas están tomando?
– qué raro entonces que Japón dependa casi al 60% de las importaciones para su alimentación, no? La tasa de autosuficiencia alimentaria de Japón está actualmente en apenas un 38%
– siempre sorprende la cantidad de productos a la venta y el consumo de todo tipo de objetos entre los japoneses… Que luego son tan tendentes al minimalismo, al orden… sin ir más lejos Marie Kondo.
- las estructuras feudales:
– crean unas estructuras de poder muy rígidas que aumentan los procesos y la burocracia a la hora de hacer cualquier mínimo cambio. La comunicación es ultra formal y no se ve con buenos ojos que se trasgreda.
– podrías explicar cómo funcionan las empresas kabushikigaisha (conservan una estructura jerárquica muy parecida a la de la época feudal).
– la gerontocracia otorga valor a la experiencia y conocimiento de los mayores, pero impide que los jóvenes aporten nuevas ideas y formas de actuar… esto me suena…
- isla de pocos recursos: Japón está conformada por casi 7000 islas, con muchas montañas y poco terreno habitable y cultivable… esto se ve en las famosas mini casas, los coche que parecen cortados por delante y por detrás o incluso hoteles cápsula, pero también en el ingenio a la hora de arreglárselas con pocos recursos.
– veo que también son muy minuciosos y detallistas, para aprovechar al máximo cada pequeño elemento
– pero esta atención al detalle les lleva también al extremo del desperdicio, por ejemplo con los envases que es algo que yo alucino, ¿no piensan en la cantidad de dinero y recursos que se desperdician así, y en lo que se está contaminando?
– esta concepción de falta de recursos, ¿tiene algo que ver con el consumismo exacerbado del que todos participan? (en las sociedades occidentales también, creo que más bien por lo contrario, por el sentimiento de nuevos ricos)
- Colectivismo e individualismo: consecuencia directa de la falta de recursos. Se ve por ejemplo en la agricultura, especialmente en el cultivo de campos de arroz.
- Necesidad de pertenecer a un grupo, mucho más importante que definir la individualidad propia. Se mueven en grupos, pero son muy reservados con lo más íntimo
- En cuestión de política, tienden a lo significarse y no disentir de lo que dicen políticos y líderes, lo cual no favorece el diálogo político y el avance social. Prensa controlada por el estado
- Hay que saber «leer el ambiente» y adaptarse a él, sino se te acaba apartando. Los extranjeros que actúan fuera de lugar tienen un pase por no ser japoneses, e incluso esto tiene un nombre:»gajin smash»
- Cultura de «alto contexto», donde el contexto y la comunicación no verbal dicen mucho más que las palabras. Es lo que se conoce como la «telepatía japonesa», se habla un tercio de lo que se desea expresar.
- Importancia del silencio, no mirar a los ojos, no hacer gestos y respetar al máximo el espacio personal… Todo para evitar expresar lo que realmente sentimos o deseamos, para mantener el wa. También falta de confianza en la persona que no conoces (con el tiempo se va permitiendo entrar a alguien con quien vas cogiendo confianza), sentimiento defensivo
- Esto en parte impone un alto control social y puede constreñir a las personas para expresarse y actuar con libertar y como realmente querrían, pero por otro lado les da sentimiento de pertenencia a algo más grande, sentimiento de grupo que reconforta y que en nuestras sociedades occidentales estamos perdiendo totalmente… Fijémonos en el acopio de víveres al principio de la pandemia…
- Otros conceptos clave de la cultura japonesa:
– wa: mantener la armonía
→ Yamato daishii (gran armonía del espíritu) y yamato-gokoro (la gran armonía del corazón) se utilizan para referirse al sentido común carácter nacional, sabiduría compartida y sensibilidad del pueblo japonés. También se refiere a mantener la armonía evitando conflictos a toda costa. Sin embargo, los conflictos existen en la vida, cómo lidian con ellos si se presentan? Porque a mi modo de entender, o se enfrentan para tratar de resolverlos, o alguna de las partes implicadas se «come» el conflicto y se queda insatisfecha, masticando su amargura.
→ la humildad/modestia, que se confunde con timidez. Esto, el respeto y las buenas maneras me gusta mucho del carácter «japonés» y lo hecho en falta en España. Por ejemplo hablar inglés: ellos se inhiben o dicen que hablan mal, mientras en España muchas veces se ridiculiza a quien habla bien, por envidia. Me hace gracia porque la inseguridad en Japón se debe a la modestia y humildad, mientras que en España se debe a la falta de autoestima, y alude más a razones históricas.
Nekojitablog: La timidez japonesa https://youtu.be/sAKomIi4fzY?si=txZLrKPkJ8oOvpvD
→ aquí entra el tatemae: las obligaciones sociales que se llevan a cabo, las acciones y las opiniones expresadas deben ir en línea con el pensamiento de la sociedad en general. Cuando interviene en alcohol en ambientes informales de amigos o compañeros, pueden comenzar a actuar según el honne, esto es, según los deseos, opiniones y verdaderos pensamientos individuales. Es muy importante leer entre líneas para saber qué es lo que ocurre en realidad, cuál es la verdad, pero se puede llegar a llevar adelante una mentira compartida con graves consecuencias. De nuevo, el terror al conflicto. ¿Por qué este miedo acérrimo a discutir o estar en desacuerdo?
– haji: la vergüenza es más importante que la culpa
→ aquí podríamos incluir el hansei, que según lo que he podido leer al respecto es una forma de reflexión sobre la propia conducta, de auto consciencia sobre las acciones realizadas por uno mismo, que por un lado puede llevar a una mejora continua por medio de la metodología kaizen, pero también puede hacerte sentir tan mal como el sentimiento del pecado y la culpa cristianas. (nosotros tratamos de que no se entere nadie de que hemos hecho algo mal, y también de echarle la culpa a otro, en Japón sienten una intensa vergüenza ante la que no se pueden esconder). Y esto de reflexionar sobre cómo podríamos hacerlo mejor pasa incluso cuando han superado las expectativas y han tenido un éxito arrollador, no?
→ esto les lleva por ejemplo a cometer infidelidades cuando están en pareja monógama, sin sentirse culpables, porque “mientras no me pillen…”.
→ además de que me parece muy hipócrita, mientras no me pillen, no se vea y todos disimulen y si se enteran, hagan como que no pasa nada, pues puedo hacer de todo, no?
→ aquí entrarían los suicidios por honor, no? La famosa “muerte honorable” para salvarse de la vergüenza o el deshonor de la familia o el nombre.
→ por cierto que el tradicional samurái del harakiri o seppuku consiste en apuñalarse la barriga y abrirse en canal, y esto se relaciona con que los japoneses, al contrario que los occidentales, consideran que el alma está en la barriga, en torno al ombligo.
- contradicción entre tradición y modernidad:
- existe un respeto tremendo por su cultura, la tradición, los ancestros, los rituales… pero también la modernidad, la tecnología se come las últimas trazas del Japón tradicional. Esto lo vemos en todos los países, excepto en aquellos como Estados Unidos que apenas tienen historia, pero en Japón es muy bestia el contraste.
→ Alex Kerr “Lost Japan!
→ después de ser derrotado en la segunda guerra mundial y sufrir la explosión de las bombas nucleares en Horshima y Nagasaki, Japón se recuperó muy rápido económicamente apostando fuerte por la tecnología y especialmente por las nuevas tecnologías de la más alta calidad, llegando a competir con Estados Unidos como primera potencia mundial, hasta el estallido de la burbuja financiera de los ’80.
- Conceptos clave de la cultura japonesa:
- Heijoshin: significa «presencia de la mente», un estado ideal en el que nuestra mente y nuestro cuerpo están en equilibrio y en paz duradera. La verdad que se parece mucho a ese «estar presente» que tanto se predica en estos tiempos donde nos preocupamos tanto por la atención, vivimos en una economía de la atención y nos damos cuenta de que nuestra mente nunca está presente. Tendría algo que ver? También me recuerda a la meditación.
- Shoshin: consiste en intentar mantener siempre la mentalidad de un principiante a la hora de observar el mundo, tratar con personas o realizar alguna tarea. Relacionado con la humildad frente a la arrogancia de ser o creerse experto en algo, la curiosidad y el ánimo de aprendizaje y mejora continua. Pero esto choca un poco con esa aversión al cambio y al riesgo, con ese conservadurismo cauto, no?
- espiritualidad:
– un 61% de la población no se identifica con ninguna religión, pero casi la totalidad practica rituales de distintas religiones en momentos importantes de la vida, del año… es más importante el ritual que la creencia (en los países Occidentales y que practican las grandes religiones monoteístas, la fe es algo fundamental, aunque luego no se observen tanto los rituales) ¿por qué esta obsesión por el ritual, el proceso, el detalle? - escribes que se puede pagar para acceder a ceremonias especiales y que muchos templos y santuarios son un auténtico negocio y que no lo intentan ocultar… ¿a dónde va ese dinero? ¿esto cómo encaja con la espiritualidad?
– los kami, que son tanto espíritus como entidades de la naturaleza , el alma o dioses, están en todas partes, incluso en un teléfono móvil… digamos que ellos conviven con la espiritualidad en el mismo plano.
- y con respecto a la Naturaleza, le otorgan también propiedades animistas?
- los japoneses son conscientes del poder de la Naturaleza sobre nuestro espíritu y estado anímico, existen los famosos “baños de bosque” que se han popularizado en Occidente… qué otros ejemplos habría de esta interacción con la Naturaleza, en un país con tanta densidad urbana?
- además, la fertilidad también se recoge en rituales como algunos matsuri que llevan en procesión un falo gigante y lo hacen entrar en un templo que simbolizaría el útero, todo evento humano, natural, mágico, animal tiene recogida en un ritual… el sexo en el Japón previo a la llegada del cristianismo y luego de los occidentales era considerado algo bueno, no se veía como el pecado del cristianismo. ¿Qué ha quedado de todo ello hoy en día? ¿Pero y además de venerarse la estatua de un falo, se venera también algún símbolo de fertilidad femenina?
- el lado oscuro de Japón (Yukio Mishima reclamó la ‘espada’ del “Crisantemo y la espada”, el primer estudio antropológico moderno sobre Japón realizado por la estadounidense RuTh Benedict. Dijo que no podía ser que occidente se quedara solo con el crisantemo, lo bello, lo suave y lo cuqui de japón):
– machismo: como mujer, es de las cosas que más noto. Por ejemplo, yamato-nadeshiko se refiere a la “mujer ideal japonesa” que debe darlo todo por la familia, ser fuerte para llevar ese peso, ser femenina, humilde, amable, respetar y obedecer a su marido, ser hábil en las tareas domésticas… sin embargo, no existe el ideal masculino. ¿esto cómo se refleja hoy en día?
→ el machismo tiene su origen en la época Edo, la de los samurais, cuando se estableció que eran los hombres los cabeza de familia y los que debían heredar (Katoku). Tras la segunda guerra mundial, el país estaba devastado, se abolió el Katoku y las mujeres y los hermanos pequeños podían heredar. El milagro económico (desde 1955)se fundó sobre el trabajo industrial de los hombres y sobre el consumo. Las mujeres se quedaron en casa. Problema: conciliación vida familiar y laboral, como aquí pero sin ninguna política social (o sí?)
→ mundo empresa horrible, política también. Ven a las mujeres como productoras de hijos que el país necesita, pero no hay ayudas para tener esos hijos
→ quizá lo veamos aún más acusado por el sistema de jerarquía (senpai – más experimentado, kohai – menos experimentado, tiene que servir a los senpai)
→ las mujeres tienden a infantilizarse a sí mismas, a actuar como si fueran bobas y torpes y no supieran hacer nada, para que los chicos no se sientan amenazados y poder casarse. También en el plano físico, tienen que ser ultra delgadas, y hacerse como chiquititas y siempre se las anima a adelgazar más y más. Y además, según he escuchado en el podcast Dramas y sakuras, de Anshin Doyle, existe una fuerte competencia entre las chicas por los hombres, por lo que ella y su entrevistada contaban que era difícil hacer amigas.
→ aquí encuadraríamos la pornografía, consumida entiendo que casi exclusivamente por hombres y en la que hay una verdadera obsesión por las chicas vestidas en uniforme escolar, cuanto más jóvenes mejor.
→tengo una anécdota de mi hermana cuando fue a Japón y fue invitada a cenar en casa de una amiga japonesa que había conocido haciendo un Erasmus, Kana, y el padre no paraba de llenarle la copa de sake al novio de mi hermana, pero a ella nada. luego le regaló una botella de sake con un vasito al novio. Después de una breve discusión de la amiga con su padre, el padre añadió un vasito más al regalo para mi hermana.
→ mujeres confort (esclavas sexuales) coreanas después de la guerra con Corea.
– condenar a alguien al ostracismo por no asimilar completamente y si expresar dudas el sentir general, por no guiarse por el tatemae, por ser distinto de alguna manera o querer destacar
→ ijime, el bullying en el colegio o instituto, que muchas veces lleva a fenómenos como los ikkikomori o chavales que se recluyen en casa
→ mobbing: Ser condenado al ostracismo en la empresa por cometer errores para que acabes por marcharte: “Estupor y temblores”, de Amélie Nothomb. La sociedad japonesa in a nutshell: una estructura fuertemente jerarquizada, tremendamente machista, llena de rituales y procesos que no se pueden saltar, y donde el colectivo importa más que el individuo. Si cometes un error, eres degradado y sufres mobbing hasta que recuperas tu puesto o te vas, para que no tengan que echarte ya que está mal visto despedir.
→Todo esto puede llevar incluso al suicidio. Japón tiene una de las tasas de suicidio más altas del mundo, y es que el grupo lo es todo, por lo que, si te excluyen , no eres nada… También la vergüenza puede llevar a ello, por ejemplo en caso de estafas en empresas…
- el exceso de horas de trabajo que puede derivar en el karoshi, muerte por exceso de trabajo: la huelga a la japonesa consiste en trabajar hasta reventar, pero ya trabajan así la mayoría de los salary man que vuelven a casa de noche o duermen en algún hotel cápsula después de emborracharse con los colegas de la oficina. Hay una fuerte competencia para encontrar un buen empleo y es muy importante acertar a la primera, ya que los empleados japoneses tienen el récord de permanencia en la misma empresa, algo que se valora mucho es un trabajo de por vida.
- la contaminación: claro, entre la producción industrial de todo tipo de productos, sobre todo tecnológicos, el consumo en tasas altísimas y el desperdicio de envases, la mayoría de los ríos y las costas de Japón están contaminados…
- Soledad: de los jubilados por falta de familia o vivir solos (tb en España), de la gente que vive sola, de los que han sido marginados o se automarginan tipo hikikomori. Gente que alquila amigos. Todo esto existe también en España, pero parece que Japón es la avanzadilla del mundo, para bien y para mal.
- Gente que quiere desaparecer por las altas expectativas sociales o familiares
- El escritor Yukio Mishima afirmó sobre el libro de Ruth Benedict “El crisantemo y la espada”, una de las primeras obras antropológicas sobre Japón realizadas durante la 2ª Guerra MUndial a partir de testimonios que Benedict extraía de exiliados en Estados UNidos, que “Occidente nunca entenderá la mentalidad japonesa si sólo se queda con el crisantemo (la parte suave y bella) y obvia la espada (la parte dura, fiera).
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